Otro "trabajo" que puede encajar bien en la serie Cuando me aburro:










Unul din locurile in care ne place sa petrecem o zi, atunci cand putem sau cand este soare (foarte important) este Plaja Laida, situata in municipiul Ibarrangelu din Vizcaya , Tara Bascilor. Este o plaja cu nisip auriu si dune, deschisa la Marea Cantabrica. Este considerata zona protejata si rezerva de la biosfera.

Ne place mult spatiul larg pe care il are ca si peisajul care este intr-o continua schimbare din cauza fluxului si a refluxului. Este ideala pentru a te deconecta, asa cum se poate vedea in pozele de mai sus.


Uno de los sitios donde nos gusta pasar un día, cuando podemos y cuando hay sol (muy importante) es la playa de Laida situada en el municipio vizcaíno de Ibarrangelu, País Vasco. Es una playa con características dunares con arena dorada, abierta al Mar Cantábrico. Está considerada zona protegida, reserva de la biosfera.

A nosotros nos gusta mucho por el espacio largo que tiene y los cambios de paisaje, en marea alta casi no queda playa libre y en bajamar la arena esta mojada, ideal para desconectar, como se puede ver en las fotos de arriba.



Con el paisaje tan impresionante de los Carpatos, el Castillo de Peles, uno de los monumentos históricos más importantes de Rumania, es una visita obligada debido a las hermosas imágenes que ofrece tanto en invierno, con los jardines nevados, como en las demás estaciones, con los árboles y las montañas formando una de las fortalezas naturales más hermosas de la nación.

Esta situado en provincia Prahova, a 45 km. de Brasov y a 121 km. de Bucarest. Es una de las importantes estaciones turisticas y de tratamiento con aguas minerales del pais. Con telecabina se puede subir a Cabaña Cota 2000 metros y tiene varias instalaciones para hacer deportes del invierno, sky, snowboarding, etc.

El Castillo Peles tiene 160 habitaciones decoradas con lo mas fino del arte europeo, candelabros de cristal de Murano, ventanas de acero alemán y paredes cubiertas con pieles de Córdoba. El mobiliario de la Sala de Música, por ejemplo, es de madera de teca, un regalo del Maharajah de Kapurtala al rey Carol I, y todos los bordados de seda que adornan el cielo raso del Salón Turco han sido hechos a mano.
Pasear por sus pasillos es un viaje en el tiempo a la época en que los castillos y los señores feudales realmente dominaban la región.

El Castillo de Peles fue construido en 1873, por orden del rey Carol I quién se había enamorado de la región montañosa en sus visitas del año 1866. Primeramente, el castillo funcionaba como casa de veraneo del monarca, y centro de caza privado para su majestad e invitados.

Además de otros edificios, como las habitaciones para oficiales, el centro de caza, y la cabaña para los cazadores, el castillo de Peles fue el primero en funcionar completamente con energía eléctrica, y la planta de energía fue construida cerca del castillo, en Rumania.

Más pequeño, pero anexado al castillo de Peles, está el castillo Pellisor, construido por orden del rey Ferdinand y representando los lineamientos artísticos del movimiento denominado Art Nouveau.

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